Biomasa en lugar de carbón mineral: El Grupo Koehler inaugura su central térmica descarbonizada

Tras dos años de intensos trabajos de construcción, el Grupo Koehler pudo inaugurar con una celebración el 12 de marzo de 2025 su central térmica convertida situada en la sede principal de la empresa en Oberkirch. La conversión de la central eléctrica se considera como un proyecto pionero en la industria, y marca un paso significativo en dirección a la generación de energía sustentable para la empresa familiar. En lugar del combustible fósil, ahora se utiliza una biomasa ecológica amigable con el clima para suministrar energía a la producción de papel en la sede de Oberkirch. Para este proyecto de enormes dimensiones fue necesario un volumen de inversiones de más de 70 millones de euros.

Referencia para el futuro de la producción de papel

La celebración de la inauguración se llevó a cabo en presencia de numerosos socios del proyecto y representantes de la política. En sus palabras introductorias, el presidente del consejo directivo del Grupo Koehler, Kai Furler, recalcó la importancia de este proyecto para la empresa familiar y las próximas generaciones de Koehler. “Con esta conversión enviamos una clara señal en favor de la protección ambiental y la transición energética. Estamos orgullosos de ahorrar anualmente 150,000 toneladas de emisiones directas fósiles de CO2, y al mismo tiempo asegurar nuestra producción mediante un suministro de energía que protege el clima. Porque esta es la base para que sigamos teniendo éxito a mediano y largo plazo en el mercado”.

Exigente proyecto de construcción, en ciertos periodos con hasta 30 diferentes especialidades al mismo tiempo

Entre los desafíos se contaron, según Josef Hofer, director del proyecto de la conversión, los trámites con las autoridades reguladoras y la ciudad de Oberkirch, y la cooperación con arquitectos, ingenieros estructurales, y muchas otras especialidades. Una gran parte de las medidas de construcción y del montaje de la tecnología de instalaciones para el suministro de combustible, así como para las medidas de infraestructura necesarias, se tuvo que realizar mientras estaba funcionando la central eléctrica, para hacer lo más breve posible la fase de detención de las instalaciones.